BICHO DE LUZ SIN LUZ

Bicho de luz sin luz,
¿en qué raudal de sombra te ensimismas
y en qué nada de nada sobrenadas
como un pez que en el aire naufragase?
Cuando aparece el canto de los perros
Y deambula la bula de los papas
y el grillo en capa escupe su armonía,
bicho de luz sin luz,
¡en qué pistilo se te agoniza
el medular instinto?
Raya de cebra sola
desprendida inusitadamente
del cuerpo madre,
¿a qué recurres para clamar justicia,
con qué elocuente furia de resignas,
con qué resignación te desintegras?
Porque no sé si me equivoco
en postular tu vida sin respuesta
y acaso no es tu ocaso
sino una nueva forma,
una metamorfosis más
de la esperas hermosos resultados.
Pero, no sé, presiento que,
aún en la celda estrecha
en que te abismas,
y, aunque sea por bien que te encegueces,
bicho de luz sin luz,
te me asemejas
al hambriendo que va sin decir nada
entre la cornucopia shoppinguera.

Jorge Luis Estrella

¡ Qué mujer!

Y ahora la pobrecita
pregunta desorientada
¿dónde está la dentadura
que dejé sobre la cama?

Ya las medias están rotas
y los tacones gastados
pero si cierra un ojo
le parece que están sanos.

Del pelo ya ni se acuerda
¡la pelada mal no queda!
y si la esperan un rato
hasta la ceja se arregla.



Liliana Varela

Luciérnagas-poema iluminado

Luciérnagas, luciernaguitas,
cuchicientas lucecitas
nacidas a troche y moche
iluminando la noche,
llenándome de alegría
justamente en este día
día del amor sin fin,
día de San Valentín.

Yo sé que Emilio las niega
con una persistencia ciega
pero no importa su enojo
ni lo que diga a su antojo
total, mis dulces hijitas
irán a verlo, juntitas,
y, al darle un beso en la frente,
todo será diferente.

¡Feliz día!, mis queridos amigos y tengan en cuenta que me estoy
reponiendo de un alumbramiento difícil.

Jorge Luis Estrella

Doble trabajo tendrás;
ya te lo advierto, María,
pues con Estrella hoy en día
no me pienso yo achicar.
El ha parido mil luces
y a mi me puso los cuernos;
es maldición de el Averno...,
¿quien la dio sus altramuces ?.
Si yo he cambiado de estancia
pues al terminara la boda
la dama no quiso alcoba,
¿como ocurrio desde Francia ?.
Aqui no muestro interes
de alimentar las boquitas
y de pagar sus ropitas...,
pero vamos, ¡ que ni un pelo la toqué !
¡¡ seguro..., que fue Internet !!!.

EMILIO MEDINA MUÑOZ

La Liebre. Seguidilla.

1. Cuatro galgos corrían
tras una liebre,
cuatro galgos corrían
tras una liebre,
cuatro galgos corrían.
• Cuatro galgos corrían,
como no la alcanzaban,
la maldecían,
como no la alcanzaban,
la maldecían.
• Eso ha pasado;
que carrera me diste
por el mercado,
que carrera me diste
por el mercado.
2. No te maldigo
porque es pecado,
no te maldigo
porque es pecado,
no te maldigo.
• No te maldigo,
después de la carrera
ya soy tu amigo,
después de la carrera
ya soy tu amigo.
• Fue gran trabajo,
el andar a tu lado
y el ir del brazo,
el andar a tu lado
y el ir del brazo.
3. Tengo paciencia,
aunque tu no lo creas
tengo paciencia,
aunque tu no lo creas
tengo paciencia.
• Tengo paciencia,
pues cazar una libre
tiene su ciencia,
pues cazar una liebre
tiene su ciencia.
• Con gran cariño,
despacito o corriendo
tendremos niños,
despacito o corriendo
tendremos niños.


Emilio Medina M.

Neuro es ona
se hace la dura
mas es potra.
La han visto en un grupo
se hace la otra,
toca la trutruka
es folk- lórica
es eutrapélica
y periclita.
Ademá suma e incita.
Tuta.

Oscar N. Galante

Ter impos loq eliseo
me hago el nudo de la corbata
con una culebra viuda
lilianeo en sec mac
oscarceo aneo
fuego de luna quemada en la neurona
potranca dura de domar
azul leo azuleo azul escribo
benteveo
nadillamiento Condorcanqui
el agua del Paraná desbordó mi vaso
pur aleteo mir
incandescente mirada
el manicomio de Muestrario
abre las 24 horas
precios accesibles
los que se creen Napoleón pagan doble
los que son Napoleón
entran gratis.
Cui cui.

Jorge Luis Estrella