jueves, 21 de febrero de 2008

Desesperadamente

A es una pécora rabiosa
que esclavo me tiene sin razón,
que loca me arranca el corazón
siendo guapa y además mujer graciosa.

Engaños me da con la comida
heridas en el alma voy sintiendo,
lamentos imposibles que te cuento
vinagre que derrama en mis heridas.

Voto a tal, será que la maldiga,
pues cansada mi alma enamorada,
voy notando que me mata la malvada
y que pronto, pasare por otra vida.


Emilio Medina M.

No hay comentarios: